miércoles, 6 de septiembre de 2017

ENTREGA ABSOLUTA


Quiero sentirte, sufrirte,
Saborear el dolor de tu amor,
Tu olvido de agonía,
El desprecio de mi llanto,
Mi súplica en la nada.

Deseo esa punzada horrible,
En mi cuerpo,
En mi alma.
Recordar eternamente tu furia
       tu gemido al final,
       roto de amor.
Ese que te niegas,
El que tus ojos canallas delatan.
Añoro el dulzor de tu saliva,
La dulzura de tu boca al escupir,
La sed de tu sudor caliente,
El calor de tu piel abusiva.

Y espero sin esperanza
Con mi carne ansiosa de tu olor
Mis muñecas vacias de acero,
La espalda olvidada de tus caprichos,
Pezones tristes sin tus dedos,
Esas uñas sin piedad,
El cuello sin collar
Libertad como cadena fría
Que sin ti, cómo ¿podría usar?

No volverás, lo se,
Poder volver a vivir,
Entregarme a tu antojo
A tu escalofriante crueldad.
Volver a saborearme;
El dulzor de mi sangre,
Que tu robabas en mis labios,
El ansia de mi sed que tu aliviabas,
Salobre, caliente,
El hambre..., de lo tuyo,
Tu espalda al alejarte;
Sin una mirada atrás,
Sin un recuerdo,
Sin un adios.